Hoy me lancé a una nueva aventura personal, no es la primera vez que viajo en avión pero sí la primera en la que lo hago sola y todo el tiempo tenía la constante sospecha de que me perdería en una de las terminales de Madrid y acabaría perdiendo el vuelo o aterrizaría en cualquier otra parte del mundo, que pensándolo bien, según cuál fuera el destino, no estaría mal, ¿No creéis?
Este artículo está dirigido para todas aquellas personas que como yo nunca habían viajado solas, para aquellos que cogen por primer vez un avión y no saben cuáles son las condiciones en las que tiene que fijarse.
En mi caso, accedí al aeropuerto de Madrid a través del metro, lo que facilita bastante la labor ya que en la línea 8 te vienen perfectamente indicada la parada según la terminal en la que tengas que embarcar.
La aventura de hoy era con un destino nacional, la verdad que nos da igual porque el proceso siempre es el mismo, sólo hay que prestar atención.
En primer lugar ¿Qué tipo de maleta llevas? ¿Quieres facturar o llevar equipaje de mano?
En mi caso, mi objetivo era llevar maleta de mano para evitarme la espera a la llegada de mi destino. También era la primera vez en la que pretendía viajar de esta manera por lo que ¿Las medidas de mi maleta serían las válidas?
Por si acaso y, como mujer prevenida que soy, me fui más de una hora antes al aeropuerto para no llevarme sorpresas en el trayecto.
Tras recorrerme los pasillos siguiendo la flecha hacia la Terminal 1, lo primero que encontré eran los mostradores de facturación de Easy Jet, recordaba de anteriores viajes que tenían una especie de mostrador en el que podías meter tu maleta para comprobar si se sobresalía a las medidas permitidas.
Así que, como os imaginaréis, para allí fui completamente decidida a probar si mi maleta cumplía con los estándares y finalmente ¡Sí!
En el caso de que hubiera tenido que facturar, simplemente hubiera tenido que hacer la cola en el mostrador de facturación de mi compañía y listo. Siempre tener en cuenta cuáles son los máximos de peso de cada compañía para no tener que pagar ningún extra.
Zona de Control
Después de terminar con el factor ?maleta?, el siguiente paso será pasar por el área de revisión de metales y los objetos que uno lleve.
Ten a mano tanto el billete como el documento de identificación (DNI o similares) para poder pasar por el detector.
Si llevas maleta de mano tendrás que poner en la bandeja los líquidos en una bolsa transparente y hermética (preferiblemente, llévatela de casa) que no puede superar los 100 ml.
Cuando hacemos mención a los líquidos nos referimos a bálsamo labial, pintalabios, cremas de manos, desodorantes, lacas de pelo, etc.
También todo aquello que lleves de metal como el cinturón, si llevas botas también debes de ponerlas en la bandeja al igual que el portátil o la cámara réflex.
Si llevas equipaje de mano también deberás de ponerlo sobre la bandeja, incluido el bolso.
Puerta de Embarque
Una vez que ya nos hayamos vuelto a vestir y estemos preparados para continuar el viaje, enseguida encontrarás el panel en el que indican las horas de salida de los diferentes vuelos.
Puedes buscar tu vuelo por horas o fijarte en la compañía o el destino, como gustes. Ahí encontrarás indicado cuál es la puerta de embarque por la que vas a entrar para subir al avión.
Dirígete hasta allí donde podrás esperar en los asientos de la terminal o si te queda mucho tiempo, aprovecha para hacer algunas compras o dar una vueltecilla.
Un consejo, mira de vez en cuando el panel que encontrarás en tu zona de embarque porque pueden cambiar el lugar. No lo van a avisar por megafonía pero si verás que en el panel desaparece, no te asustes, puedes volver al panel del principio o alguno que se encuentre en el pasillo para comprobar cuál es la nueva puerta de embarque.
Y ya está, al entrar en el avión te pedirán de nuevo el billete de avión y el DNI, sólo queda disfrutar de un buen viaje y ver como las nubes quedan a tus pies.
Espero que tengas un viaje excelente y, aunque sólo sea por estar informado de cuáles son los trámites, no dejes de informarte sobre seguro de viajes: si te pierden la maleta, si se retrasa el vuelo o lo anulan, etc.
¡Bon voyage!