Descubriendo Perú ¿Qué ver en Trujillo?

Nuestra llegada a Lima sólo había supuesto el comienzo de algo que todavía estaba por descubrir, un algo que no era capaz de imaginar, una belleza a la que mis ojos no estaban acostumbrados «La ciudad de la eterna primavera»

plaza de armas trujillo

Próximo destino: Trujillo

La noche en el hotel JW Marriott de Lima había sido una auténtica delicia, entre el agotamiento y la impresionante cama que tenía para mí solita, había descansado todo lo que necesitaba para seguir descubriendo Perú. Estaba ansiosa por probar el desayuno del Marriott, Victoria me había comentado que tenía muy buena reputación, pero teníamos que volar temprano así que tendría que reservarme para días futuros.

Cuando todavía no había amanecido ya estaba Sofía y Marcelo esperándonos en el hall del hotel para llevarnos hasta el aeropuerto de Lima y comenzar nuestro viaje hacia la ciudad de Trujillo. Al fin íbamos a conocer a María Paz, la persona de Promperú con la que había estado hablando desde España meses antes al viaje y la encargada de acompañarnos durante toda nuestra estancia en Perú. Son muchas las anécdotas que tenemos las ?Tres Marías? (María Victoria, María Paz y María de los Ángeles) que ya os iré contando.

Teníamos pensado volar a las 6:20 de la mañana pero el vuelo comenzó a retrasarse. Llegó el momento en el que empecé a pensar que perderíamos todo el programa del día pero finalmente, el tiempo mejoró en Trujillo y conseguimos volar horas más tarde.

La distancia de vuelo entre Lima y Trujillo es de 1,30 horas aproximadamente, por lo que llegamos directas a comer. Tuvimos mucha suerte de que Judith nos estuviera esperando para poder aprovechar al máximo la visita y, la verdad, es que supieron acotar todo para que no perdiéramos nada de las bellezas que encontraríamos en Trujillo.

Huanchaco

Mientras estábamos de camino a Huanchaco, Judit nos iba contando la historia de este lugar, por ejemplo, Huanchaco procede de la palabra Guaukocha, lo que significa ?Hermosa laguna de peces dorados?.

huanchaco

Trujillo es uno de los lugares más visitados por los turistas, Huanchaco por los Caballitos de Totora y Chicama por ser la playa con la ola izquierda más larga del mundo, lo que ha supuesto que se celebren allí muchas competiciones de surf.

Cerca del Café Restaurante del Club Colonial donde íbamos a comer estaban los famosos Caballitos de Totora.

caballitos de totora

Se llaman así por la posición del navegante que se sienta como si fuera a montar a caballo. En la antigüedad, algunos hablan de mil a tres mil años aC., estas embarcaciones se utilizaban para la pesca, mientras que en la actualidad se siguen utilizando para la pesca tradicional pero en alguna ocasión suele pasear a los turistas una vez terminada la jornada.

Estos caballitos son utilizados por un sólo pescador y suele durar aproximadamente dos meses. Como veis en la fotografía, tienen unas grandes dimensiones y cuenta con dos remos en sus laterales.

Comida en Café Restaurante del Club Colonial

A pesar de que Victoria y yo somos unas apasionadas de la gastronomía y de probar todos los platos típicos, tuvimos que recortar nuestras ansias de degustación por conocer al máximo todo lo que pudiéramos ver de Trujillo.

restaurante club colonial

Aún así, sólo nos saltamos el postre y acabamos compartiendo platos para poder probar la mayor cantidad de sabores. El hecho de que os diga que nos saltamos el postre puede pareceros sin importancia, pero para una golosa como yo… ¡Es un esfuerzo!

club colonial cafe restaurante

Algo muy típico o que al menos me he encontrado con frecuencia en los restaurantes, es que como tentempié te ponen un poco de pan con mantequilla mientras se prepara la comida. La mantequilla es diferente a la que tenemos aquí en España, tiene un sabor más suave.

Dos platos típicos que probamos era el pescado a la Meniére y el Pescado sudado con ají amarillo, este segundo pica por el ají, a mí me encantó.

comida en trujillo

Visitas arqueológicas en Trujillo

Nada más terminar de comer nos dirigimos a la Ciudadela de Chan Chan, es un lugar que no puede dejar indiferente a nadie, es imposible, porque su grandiosidad impresiona incluso desde lejos cuando sólo ves las paredes de la muralla.

chan chan

En cuanto terminamos de conocer Chan Chan, de nuevo nos pusimos en camino para trasladarnos hasta La Huaca del Sol y la Luna, una pirámide de unos 20 metros de altura que se construyó en sólo 3 días y que todavía sigue en pie, son de una civilización anterior a los incas.

Primero entramos en el Museo Huacas de Moche y luego nos adentramos en la Huaca de la Luna que es la que se puede visitar (en la foto, la Huaca del Sol).

huaca del sol trujillo

En un principio pensaba contaros aquí todos los detalles pero finalmente haré un artículo único para estas dos visitas, ya que son muchas fotos, historia y tenemos que ponernos en situación para imaginarnos en cada una de ellas:

  • La ciudadela de Chan Chan

  • La Huaca del Sol y la Luna

Para que os hagáis una idea del ritmo que tuvo que poner Judit, Chan Chan lo íbamos a ver durante toda la mañana y, la Huaca del Sol y la Luna por la tarde. Al final conseguimos ver todo sin perder detalle porque también tengo que deciros, que la pasión con la que nos lo transmitía y todos sus conocimientos, hicieron que fuéramos absorbiendo todo sin sentir cansancio alguno.

Descubriendo Trujillo

Nada más terminar nuestras visitas arqueológicas, nos dejaron en el Hotel Libertador de Trujillo donde pudimos deshacer las maletas, asearnos un poco y? descansar no. ¡Victoria y yo nos fuimos a conocer un poquito Trujillo!

hotel libertador de trujillo

El hotel se encontraba justo en la Plaza de Armas de la ciudad por lo que nos encontramos frente a un espectáculo de colores maravilloso.

catedral de trujillo

Además, en esta misma plaza se encuentra la Catedral de Trujillo construida entre 1647 y 1666. Trujillo sigue siendo una ciudad de contrastes, te encuentras en la parte colonial viendo mansiones y casas absolutamente preciosas como en la entrada a la ciudad ves la cara opuesta.

peatones trujillo

Un aspecto que no deja de llamarme la atención es que no respetan los pasos de cebra ni los semáforos ni nada, tampoco los peatones como veréis en la fotografía.

turismo en trujillo calle pizarro

Resultaba una tremenda locura, cruzar se convertía en una aventura que logramos llevar a cabo para ir a la calle Pizarro, donde descubrimos muchísimas tiendas con productos gastronómicos típicos como el King Kong y aprovechamos para comprar en pequeñas dosis e ir descubriendo nuevos sabores.

king kong gastronomia peruana

En nuestro paseo por esta calle, pudimos ver un grupo de espontáneos bailando y tocando música peruana, hombres esperando su turno a que les limpiaran los zapatos o una exposición de arte peruana en la Fundación BBVA Continental, en la Casa de la Emancipación.

musica trujillo

Una hora después regresamos al hotel para descansar y prepararnos para la cena, que creo que no necesita mucha más presentación si veis esto:

comida hotel libertador trujillo

Respecto al hotel, si os diría que al ver los precios me pareció bastante caro para lo que son las habitaciones y la cocina resultó un tanto lenta para los pocos comensales que éramos, también puede que sea algo anecdótico pero creo que merece la pena compartirlo.

Más artículos sobre nuestro viaje a Perú

Compartir en: Twittericono twitter Facebookicono facebook Pinteresticono pinterest

También te puede interesar